REIR ES SALUDABLE
26 de Enero de 2013
Está el ginecólogo en su consulta revisando a una señora y le dice: -Señora González ¡Qué vagina tan grande! ¡Qué vagina tan grande! ¡Qué vagina tan grande!
La señora González, un poco contrariada y molesta, le advierte: -Lo escuché desde la primera vez doctor, no era necesario que lo dijera tres veces.
-No, si yo sólo lo dije una vez -dijo el doctor asombrado- las otras dos fue el eco.